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EXPLICACIÓN
EN LAS ESCRITURAS
DE
HEBREOS
1:1-3.
HEBREOS
1:8-12.
HEBREOS
9:24.
Los
expositores de la trinidad afirman que el escritor a los Hebreos demostró o
escribió de la trinidad en su carta.
Los
expositores de la trinidad dicen que la carta a los Hebreos habla de la
trinidad o de las tres personas divinas porque en ellas aparecen estas
palabras: DIOS – HIJO – ESPÍRITU SANTO; enseñando ellos que cuando se habla De
Dios se refiere al Padre la primera persona de la trinidad, cuando se
habla del Hijo es de Jesús como la segunda persona de la trinidad,
y del
Espíritu Santo como la tercera persona de la trinidad.
Es
verdad que en la carta a los Hebreos el escritor dice en hebreos 1:2 – 3, que
Dios nos habló por el Hijo, a quien constituyo heredero de todo, y que el Hijo
es la imagen misma de su sustancia.
Es
verdad que el escritor de los hebreos dice en hebreos 1:8 del Hijo, que este es
Dios y que su trono es por el siglo del siglo.
Es
verdad que en el escritor de los hebreos dice en hebreos 9:24 que el Cristo
entró en el cielo para presentarse por nosotros ante Dios.
¿Pero
será verdad que este libro habla de trinidad o tres personas divinas?
¿Pero
será verdad que el escritor a los Hebreos dice que existe un Dios en tres
personas como dicen los expositores de la trinidad?
Lamentablemente
la respuesta a estas preguntas es NO.
El
escritor de los hebreos nunca habló o
mencionó a tres personas divinas, o a tres divinidades dentro de un Dios
verdadero.
Esto
dicho por los expositores de la trinidad de que Hebreos habla de la trinidad es
solo una mala interpretación de este libro, y es una mala interpretación porque
ellos solo leen textualmente este libro y no aplican la exegesis que da el
escritor a este libro, además en este libro en el verso dos del capítulo uno,
hay una adulteración hecha al texto al traducirlo de los manuscritos en griego
al español.
Ahora,
¿entonces cuál es el pensamiento acerca de la deidad del escritor de los
hebreos?
Si
aplicamos la exegesis que aplicó el escritor de los hebreos para enseñar en su
carta, y traducimos bien el verso dos, encontramos que el escritor de los
hebreos habló o enseñó en su carta fue de la unicidad de Dios, el escritor a los hebreos habló o enseñó
sobre que Dios se manifestó en carne, es decir se hizo Hijo.
Comencemos
pues a interpretar conforme a las escrituras hebreos 1:1-3
Debemos
recordar que el escritor de los hebreos comienza su carta así:
Hebreos
1
1
Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los
padres por los profetas,
2
en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó heredero
de todo, y por quien asimismo hizo el universo;
3
el cual, siendo el resplandor de su gloria, y la imagen misma de su sustancia,
y quien sustenta todas las cosas con la palabra de su poder, habiendo efectuado
la purificación de nuestros pecados por medio de sí mismo, se sentó a la
diestra de la Majestad en las alturas,
Si
detallamos bien el verso uno, miramos allí que el contexto usado por el
escritor para dar o escribir su enseñanza está en los profetas, ya que dice
este verso:
1
Dios,
habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo
a los
padres por los profetas,
NOTA:
Recordemos
que los expositores de la trinidad dicen que Dios es uno manifestado en tres
personas diferentes la una de la otra pero iguales en majestad, Deidad, poder,
etc….
Pero el
escritor a los hebreos nos dice que Dios Hablo a los padres en los profetas, y
esto fue lo que él Hablo:
Y
esto fue lo que Dios “el Padre” habló a los Padres en los profetas:
Esto dijo Dios el Padre por medio de Moisés:
Aprende pues, y reflexiona en tu corazón que
JEHOVÁ es Dios arriba en el cielo y abajo en la tierra, y no hay
otro.
A ti te fue mostrado, para que supieses que JEHOVÁ es Dios, y no hay otro fuera de él.
(Deuteronomio 4: 39 y 35)
Oye,
Israel: JEHOVÁ nuestro Dios, JEHOVÁ uno es.
(Deuteronomio
6: 4)
Esto dijo Dios el Padre en el 1 libro de Samuel:
No hay santo como JEHOVÁ; porque
no hay ninguno fuera de ti; y no hay refugio como el Dios nuestro.
(1 libro de Samuel 2: 2)
Esto dijo Dios el Padre por medio de David:
JEHOVÁ, no hay semejante a ti, ni
hay Dios sino tu,
según todas las cosas que hemos oído con
nuestros oídos.
(1 libro de crónicas 17: 20)
Y conozcan que tu nombre es JEHOVÁ; tú sólo altísimo sobre toda la tierra.
(Salmo
83: 18)
Porque tú eres grande, y hacedor de
maravillas; sólo tú eres Dios.
(Salmo 86: 10)
Esto dijo Dios el Padre por medio
de Salomón:
Y
dijo SALOMÓN: JEHOVÁ Dios de Israel, no hay Dios como tú, ni arriba en los
cielos ni abajo en la tierra, que guardas el pacto y la misericordia a tus siervos, los que andan
delante de ti con todo su corazón;
(1 libro de reyes 8: 23)
A
fin de que todos los pueblos de la tierra sepan que JEHOVÁ es Dios, y que no
hay otro.
(1 libro de reyes 8: 60)
Esto dijo Dios el Padre por Medio
del profeta Isaías:
Yo
soy JEHOVÁ, y ninguno más hay, no hay Dios fuera de mí.
Yo te ceñiré, aunque tú no me conociste, para que se sepa desde el
nacimiento del sol, y hasta donde se pone, que no hay más que yo; yo JEHOVÁ, y
ninguno mas que yo.
(Isaías 45: 5 y 6)
Proclamad y hacedlos acercarse, y entren
todos en consulta; ¿quién hizo oír esto desde el
principio, y lo tiene dicho desde entonces, sino yo JEHOVÁ? Y no hay más Dios
que yo; Dios justo y salvador; ningún otro fuera de mí.
Mirad
a mí, y sed salvos todos los términos de la tierra, porque yo soy Dios, y
no hay más.
(ISAÍAS
45: 21 y 22)
¿A quien
me asemejáis, y me igualáis, y me comparáis, para que seamos semejantes?
Acordaos de
las cosas pasadas desde los tiempos antiguos; porque yo soy Dios, y no hay otro
Dios, y nada semejante a mí.
(ISAÍAS
46: 5 y 9)
Esto dijo Dios el Padre por Medio del profeta Jeremías:
No hay semejante a ti, OH JEHOVÁ; grande eres tú, y grande tu nombre en
poderío.
(JEREMIAS 10:6)
Y por el profeta Daniel dice:
Pero
hay un Dios en los cielos, el cual revela los misterios, y el ha hecho saber al rey Nabucodonosor
lo que ha de acontecer en los postreros días. He aquí tu sueño, y las visiones
que has tenido en tu cama
(Daniel
2: 28)
Y
el Señor Dios el Padre le dice al profeta Joel:
Y
conoceréis que en medio de Israel estoy yo, y que yo soy JEHOVÁ vuestro Dios, y
no hay otro; y
mi pueblo nunca jamás será avergonzado.
(JOEL
2: 27)
Y el Señor Dios
el Padre le dice resueltamente a Isaías en la última parte del capítulo 43 verso 10, que antes de él no fue formado Dios,
ni lo será después de él.
Como hemos visto y leído, el Señor Dios el Padre; nos dice que lo que él
dijo a los Padres por los profetas es que con él no hay otros Dioses “personas
divinas” ni en el cielo, ni en la tierra, que Él es el único y solo Dios desde
el principio.
Además nos dice el Señor que no hay nada ni
nadie semejante o igual a él.
Como hemos leído llevándolo al pensamiento
trinitario, Dios el Padre “la primera persona de la trinidad”, dice que el es
el único Dios, que con él no hay otro Dios y nada semejante a él, esto deja a
la trinidad como mentirosa, ya que Dios el Padre nunca dijo que Dios sean tres
personas diferentes en un Dios.
Además en los profetas, Dios el Padre confirma que él es el
único creador:
Levanta en alto vuestros ojos, y mirad quien
creo estas cosas; el saca y cuenta su ejército; a todas llama por su nombre;
ninguna faltara; tal es la grandeza de su fuerza, y el poder de su dominio.
¿No has sabido,
no has oído que el Dios eterno es JEHOVÁ, el cual creo los confines de la
tierra? No desfallece,
ni se fatiga con cansancio, y su entendimiento no hay quien lo alcance.
(ISAÍAS 40:26 y 28)
Así dice Jehová, tu redentor, que te formó
desde el vientre:
Yo Jehová, que
lo hago todo, que extiendo solo los cielos, que extiendo la tierra por mi
mismo:
(ISAÍAS 44:24)
Porque así dijo
Jehová, que creo los cielos; él es Dios, el que formó la tierra, el que la hizo
y la compuso, no la creo en vano, para que fuese habitada la creo: yo soy
Jehová, y no hay otro
(ISAÍAS
45: 18)
Así dice
Jehová, el santo de Israel, y su
formador: preguntadme por las cosas por venir; mandadme acerca de mis hijos, y
acerca de las obras de mis manos.
Yo hice la
tierra, y cree sobre ella al hombre. Yo, mis manos, extendieron los cielos, y a
todo su ejército mandé.
(ISAÍAS
45: 11 y 12)
Por
la palabra de Jehová fueron hechos los cielos, y todo el ejército de ellos por
el aliento de su boca.
Él junta como montón las aguas del mar; Él
pone en depósitos los abismos.
Tema a Jehová toda la tierra; teman delante
de él todos los habitantes del mundo.
Porque
él dijo, y fue hecho, él mando y existió.
(Salmo 33: 6 al 9)
Tú
solo eres Jehová; Tu hiciste los cielos, y los cielos de los cielos, con todo
su ejército, la tierra y todo lo que está en ella, los mares y todo lo que hay
en ellos; y tu vivificas
todas estas cosas, y los ejércitos de los cielos te adoran.
(Nehemías
9:6)
Y el salmista
dice:
Desde
el principio tu “Jehová” fundaste la tierra, y los cielos son obras de tus
manos.
(Salmo
102: 25)
Y es confirmado
por los profetas Isaías y Jeremías:
Jehová dijo
así: el cielo es mi trono, y la tierra
estrado de mis pies, ¿dónde esta la casa que me habréis de edificar, y donde el
lugar de mi reposo?
Mi
mano hizo todas estas cosas, y así todas estas cosas fueron, dice Jehová; pero mirare a aquel que es pobre y humilde de
espíritu, y que tiembla a mi palabra.
(Isaías
66:1 y 2)
¡OH
señor Jehová! He aquí tu hiciste el cielo y la tierra con tu gran poder, y con
tu brazo extendido, ni hay nada que sea difícil para ti;
(Jeremías 32: 17)
Y les mandaras que digan a sus señores:
Así ha dicho Jehová de los ejércitos, Dios de
Israel:
así habéis de responder a vuestros señores:
Yo
hice la tierra, el hombre y las bestias que están sobre la faz de la tierra,
con mi gran poder y con mi brazo extendido, y la di a quien yo quise.
(Jeremías 27: 4 y 5)
¿Entonces que podemos concluir a lo dicho por el
escritor a los hebreos en el verso 1, donde dice que Dios el Padre habló a los
padres por los profetas?
Podemos concluir que esto es lo que habló Dios
el Padre a los padres por medio de los profetas:
1)
Que
él “el Padre” es el único y solo Dios, que con él no hay ni habrá otro Dios ni
nada ni nadie semejante a él, que él nunca dijo que él fuera tres personas
divinas en un Dios, esto dicho por los expositores de la trinidad es mentira.
2)
Que él solo hizo los cielos y la tierra y todo
lo que en ellos hay, al hombre, la bestia, y el ejército de los cielos, todo
esto lo hizo solo el Señor, y con él no hubo otros Dioses ni nada semejante a
él “personas divinas u otras divinidades”.
3)
Es de anotar también que los hebreos son monoteístas
estrictos, ellos no creen en la mal llamada trinidad divina, los hebreos creen
que Dios es uno, único y solo, así como lo enseñan los profetas; ¿y porque digo
esto?; porque esta carta está dirigida a los hebreos, y estos son monoteístas
estrictos no trinitarios.
4)
Entonces dicho esto; es imposible que el escritor a los hebreos enseñara
trinidad o la explicara en su carta.
Capítulo 2
Explicación de la adulteración que
hay en el verso 2 de Hebreos 1
Hebreos
1:2 está mal traducido, o porque no decirlo abiertamente está adulterado, y
está adulteración fue hecha por los organismos trinitarios encargados de
traducir las escrituras, miremos como fue traducido este verso al español:
Hebreos
1
2 en estos postreros
días nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó heredero de todo, y por
quien asimismo hizo el universo;
Note
que he subrayado el inicio del verso 2, donde dice la traducción al español,
que en estos postreros días “Dios” nos ha hablado por el hijo; aquí en este punto
está la adulteración, miremos porque:
Esto
dice el texto en el manuscrito griego, traducido originalmente al español:
επ→sobre, en εσχατου→último, postrero των→de los ημερων→días τουτων→estos ελαλησεν→habló ημιν→a nosotros εν→en υιω→Hijo
Como
podemos leer le verso 2 dice originalmente:
En estos
postreros días habló a nosotros en Hijo.
Quedando
el verso completo así:
Hebreos
1:
1
Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los
padres por los profetas,
2 en estos postreros días nos ha hablado en Hijo, a quien constituyó heredero de todo, y por quien asimismo hizo el universo;
2 en estos postreros días nos ha hablado en Hijo, a quien constituyó heredero de todo, y por quien asimismo hizo el universo;
Pero
dirán los expositores de la trinidad que la preposición (εν) se puede traducir
como – en o por --, lo cual es cierto,
pero los expositores de la trinidad adulteraron este verso añadiendo el
articulo definido (el) después de (εν), por esto ellos traducen esto como si
Dios nos hubiera hablado POR EL HIJO;
cuando el texto en el manuscrito carece de dicho artículo definido el después de la
preposición εν.
Pero
dirán los expositores de la trinidad: ¿Cómo es posible que Dios nos haya
hablado en Hijo como si fuera él mismo; y no por el Hijo viendo que son dos
seres distintos?.
La
respuesta a esta pregunta está en el verso 1, ya que debemos recordar que el
escritor a los hebreos hace su exegesis es en los profetas, Y ES EN LOS
PROFETAS DONDE DIOS EL PADRE TAMBIEN HABLO Y MANIFESTÓ A LOS PADRES QUE ÉL
VENDRÍA A SALVARNOS EN CARNE, COMO UN HOMBRE NACIDO “HIJO” DE MUJER; LEAMOS:
DIOS
EL PADRE DICE ESTO POR O EN EL PROFETA ISAÍAS:
Isaías 33
22 Porque
Jehová es nuestro juez, Jehová es nuestro legislador, Jehová es nuestro Rey; él mismo nos
salvará.
Isaías 35
1 Se alegrarán
el desierto y la soledad; el yermo se gozará y florecerá como la rosa.
2
Florecerá profusamente, y también se alegrará y cantará con júbilo; la gloria
del Líbano le será dada, la hermosura del Carmelo y de Sarón. Ellos verán la
gloria de Jehová, la hermosura del Dios nuestro.
3
Fortaleced las manos cansadas, afirmad las rodillas endebles.
4 Decid a los
de corazón apocado: Esforzaos, no temáis; he aquí que vuestro Dios viene con
retribución, con pago; Dios mismo vendrá, y os salvará.
Isaías 40
1 Consolaos,
consolaos, pueblo mío, dice vuestro Dios.
2 Hablad
al corazón de Jerusalén; decidle a voces que su tiempo es ya cumplido, que su
pecado es perdonado; que doble ha recibido de la mano de Jehová por todos sus
pecados.
3 Voz que
clama en el desierto: Preparad camino a Jehová; enderezad calzada en la soledad
a nuestro Dios.
4 Todo
valle sea alzado, y bájese todo monte y collado; y lo torcido se enderece, y lo
áspero se allane.
5 Y se
manifestará la gloria de Jehová, y toda carne juntamente la verá; porque la
boca de Jehová ha hablado.
6 Voz que
decía: Da voces. Y yo respondí: ¿Qué tengo que decir a voces? Que toda carne es
hierba, y toda su gloria como flor del campo.
7 La
hierba se seca, y la flor se marchita, porque el viento de Jehová sopló en ella;
ciertamente como hierba es el pueblo.
8 Sécase
la hierba, marchítase la flor; mas la palabra del Dios nuestro permanece para
siempre.
9 Súbete
sobre un monte alto, anunciadora de Sion; levanta fuertemente tu voz,
anunciadora de Jerusalén; levántala, no temas; di a las ciudades de Judá: ¡Ved aquí al
Dios vuestro!
10
He aquí que Jehová el Señor vendrá
con poder,
y su brazo señoreará; he aquí que su recompensa viene con él, y su paga delante
de su rostro.
Isaías 52:
6 Por
tanto, mi pueblo sabrá mi nombre por esta causa en aquel día; porque yo
mismo que hablo, he aquí estaré presente.
Como vemos
Jehová, el Padre, dice, habla o promete por medio del profeta Isaías venir él
mismo a salvarnos, y él mismo dice que ÉL MISMO QUE HABLABA SE HARÍA PRESENTE
HACIÉNDOSE HOMBRE “HIJO”, LEAMOS:
Isaías 7
14 Por
tanto, el Señor mismo os dará señal:
He aquí que la virgen concebirá, y dará a luz un hijo, y llamará su nombre
Emanuel “traducido Dios o Jehová con nosotros”
Como
leemos, Isaías nos dice que el Señor mismo nos dará señal, que la virgen
concebiría y daría a luz un hijo el cual sería Dios con nosotros, y hay que
aclarar que el único Dios y Señor que
conoce Isaías es Jehová, leamos:
Yo
soy JEHOVÁ, y ninguno más hay, no hay Dios fuera de mí.
Yo te ceñiré, aunque tú no me conociste, para que se sepa desde el
nacimiento del sol, y hasta donde se pone, que no hay más que yo; yo JEHOVÁ, y
ninguno mas que yo.
(Isaías
45: 5 y 6)
Proclamad y hacedlos acercarse, y entren
todos en consulta; ¿quién hizo oír esto desde el
principio, y lo tiene dicho desde entonces, sino yo JEHOVÁ? Y no hay más Dios
que yo; Dios justo y salvador; ningún otro fuera de mí.
Mirad
a mí, y sed salvos todos los términos de la tierra, porque yo soy Dios, y
no hay más.
(ISAÍAS
45: 21 y 22)
¿A quien
me asemejáis, y me igualáis, y me comparáis, para que seamos semejantes?
Acordaos de
las cosas pasadas desde los tiempos antiguos; porque yo soy Dios, y no hay otro
Dios, y nada semejante a mí.
(ISAÍAS
46: 5 y 9)
Como podemos ver, Dios el Padre dice que él mismo es el que
nacerá de la virgen, ya que ese niño es Jehová. Dios con nosotros, y así lo
leemos en Isaías 7:14 pero esto no queda allí solamente, Jehová el Padre le
dice a Isaías que ese niño que nacería es él mismo, el PADRE ETERNO, leamos:
Isaías 9:6
6
Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su
hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno,
Príncipe de Paz.
Ahora,
como ya leímos para Isaías Jehová es el único Dios, PERO JEHOVÁ LE MUESTRA A ISAÍAS QUE ÉL
ES EL ÚNICO DIOS FUERTE Y EL SALVADOR TAMBIÉN, Y PARA ISAÍAS JEHOVÁ ES EL
PADRE, leamos:
Isaías 44
8 No
temáis, ni os amedrentéis; ¿no te lo hice oír desde la antigüedad, y te lo
dije? Luego vosotros sois mis testigos. No hay Dios sino yo. No hay Fuerte; no conozco ninguno.
Isaías 60
16 Y
mamarás la leche de las naciones, el pecho de los reyes mamarás; y conocerás que yo
Jehová soy el Salvador tuyo y Redentor tuyo, el Fuerte de Jacob.
Y para
Isaías Jehová es el Padre:
Isaías 63
16 Pero tú eres
nuestro padre, si bien Abraham nos ignora, e Israel no nos
conoce; tú, oh Jehová, eres nuestro
padre; nuestro Redentor perpetuo es tu nombre.
Ahora,
como ya vimos, Jehová el Padre le dijo a Isaías que él mismo es el que nacería
de una virgen, es ratificado por el mismo Jehová en Isaías 9:6, doce dice que
ese niño que nacería es él mismo, EL DIOS FUERTE, EL PADRE ETERNO.
Pero esto
no queda así, Jehová el Padre le dice a Isaías que él mismo es el que nacerá,
leamos:
Isaías 60
(antigua versión)
LEVÁNTATE, resplandece; que ha venido tu
lumbre, y
la
2 gloria de Jehová ha nacido sobre
ti. Porque
he aquí que tinieblas cubrirán la tierra, y oscuridad los pueblos: más sobre 3
ti nacerá Jehová, y sobre ti será vista su gloria. Y andarán las gentes á tu luz, y los reyes al
resplandor de tu nacimiento.
Como
podemos ver y leer, Dios el Padre “Jehová” nos dice en el profeta Isaías que él
mismo vendría a salvarnos, que él mismo que habla se haría presente, y lo haría
haciéndose hombre o hijo al nacer de una mujer virgen, es por esto que el
escritor a los hebreos haciendo exegesis en los profetas, nos dice que Dios
habló a los padres en los profetas, y lo que habló Dios en los profetas es que
él es el único Dios y que el mismo vendría a salvarnos haciéndose hombre “hijo”.
Ø ES POR ESTO QUE EL ESCRITOR A LOS
HEBREOS DICE QUE DIOS EN ESTOS POSTREROS DÍAS NOS HABLÓ EN HIJO, ya que él en los
profetas así lo determinó.
Ø Es por esto que el
escritor a los hebreos escribió en hebreos 2:14, que por cuanto los hijos
participaron de carne y sangre, él “haciendo mención al Padre” también
participó de los mismo.
Con esto el escritor a los hebreos nos explica
que el Padre también tomo cuerpo de carne y sangre al igual que los hijos “los
seres humanos” para por medio de este cuerpo de carne y sangre destruir por medio de la muerte al que tenía
el imperio de la muerte, esto es, al diablo. (Hebreos 2:14), POR ESTO ES QUE
HEBREOS 1:2 LEGALMENTE TRADUCIDO DICE QUE DIOS “EL PADRE” EN ESTOS POSTREROS
DÍAS NOS HABLÓ EN HIJO.
Ø Es por esto que el final
del verso 2 de hebreos 1, trae un pronombre reciproco, y este conjugado en
singular, este pronombre es ASIMISMO, y
así termina este verso: a quien constituyó heredero de todo, y por quien asimismo hizo el
universo;
Note algo, el texto dice que Dios en estos
postreros días nos habló en Hijo, y por quien asimismo hizo el universo;
Si se tratasen de dos entes o seres o personas
diferentes, el texto no terminaría con ese pronombre reciproco “asimismo” en
singular conjugándolo así el escritor, dando a entender que ese Hijo y el Padre
son el mismo ya que él nos dice que Dios “el Padre” nos habló en Hijo; sino que
terminaría el texto sin ese pronombre y con la preposición con en lugar de por, dando a entender el
escritor que con Dios el Padre estaba también el Hijo en la creación, y
quedaría el texto así:
2 en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo,
a quien constituyó heredero de todo, y con quien hizo el universo;
Pero como el escritor a los hebreos nos dice que Dios nos habló en
estos postreros días en Hijo, por eso dice que asimismo hizo el universo, YA
QUE DIOS “EL PADRE” ES EL ÚNICO DIOS Y CREADOR DE TODO, Y EL MISMO VINO A
SALVARNOS TOMANDO FORMA DE HOMBRE AL NACER DE UNA MUJER.
POR LO TANTO LO DICHO POR LOS EXPOSITORES DE LA
TRINIDAD QUE HEBREOS HABLA DE TRINIDAD ES MENTIRA.
CAPITULO 3
Ahora,
los expositores de la trinidad quieren argumentar en base a hebreos 1:3 que
Jesús al ser el resplandor de la GLORIA DE DIOS, Y LA IMAGEN MISMA DE SU
SUSTANCIA, es otro ser, persona, Dios,
diferente a Dios el Padre, pero como vemos que la exegesis del escritor a los
hebreos es los profetas, es allí que encontramos la interpretación a hebreos
1:3 que dice así:
3
el cual, siendo el resplandor de su gloria, y la imagen misma de su sustancia,
y quien sustenta todas las cosas con la palabra de su poder, habiendo efectuado
la purificación de nuestros pecados por medio de sí mismo, se sentó a la
diestra de la Majestad en las alturas,
Miremos pues
en los profetas cual es la gloria de Dios y la imagen misma de su sustancia:
La
escritura de los profetas nos enseña que la gloria de Dios es la parte visible
“la imagen” del Dios invisible, miremos esto en la escritura:
Y
sobre la expansión que había sobre sus cabezas se veía la figura de un trono
que parecía de piedra de zafiro; Y SOBRE LA
FIGURA DEL TRONO HABÍA SUNA SEMEJANZA QUE PARECIA DE HOMBRE SENTADO SOBRE ÉL.
Y
vi apariencia como de bronce refulgente, como apariencia de fuego dentro de
ella en derredor, desde el aspecto de sus lomos para arriba; y desde sus lomos
para abajo, vi que parecía como fuego, y que tenía resplandor alrededor.
Como
parece el arco iris que está en las nubes el día que llueve, así era el parecer
del resplandor alrededor. ESTA FUE LA VISIÓN
DE LA SEMEJANZA DE LA GLORIA DE JEHOVÁ, Y CUANDO YO LA VI, ME POSTRÉ SOBRE MI
ROSTRO, Y OÍ LA VOZ DE UNO QUE HABLABA.
Ezequiel
1:26-28
Como
podemos ver, el profeta Ezequiel nos enseña o nos muestra que la gloria de Dios
“Jehová el Padre” o su imagen es la figura como de un Hombre, y el profeta nos
dice que está es la gloria de Dios o su imagen, pero nunca dejando se ser el
único Dios.
Ahora,
los escritores del nuevo testamento nos dicen que Jesús es esa gloria o imagen de Dios, leamos:
Él es la imagen del Dios
invisible, el primogénito de toda creación
Colosenses
1:15
El cual siendo el
resplandor de su gloria, y la imagen misma de su sustancia; y quien sustenta todas
las cosas con la palabra de su poder, habiendo efectuado la purificación de
nuestros pecados por medio de sí mismo, se sentó a la diestra de la majestad en
las alturas.
Hebreos
1:3
Y
Jesús como la imagen del Dios invisible, es toda su plenitud (colosenses 2:9).
¿Pero
significa esto que Jesús al ser la gloria de Dios o la imagen de Dios, es otro
diferente a Dios?
Definitivamente
no, como dijimos y vimos por medio de las escrituras del profeta Ezequiel la
gloria de Dios es la imagen del Dios invisible, pero sin dejar ser el único
Dios, y Jesús según las escrituras al ser la gloria del único Dios o la imagen
del único Dios, NO ES OTRO DIOS, ya que Dios “Jehová” prometió en los profetas “contexto
que usa el escritor a los hebreos” venir
en gloria, es decir en semejanza de un hombre, leamos:
Por
cuanto Jehová habrá edificado a Sion, Y EN SU GLORIA SERÁ VISTO.
Salmo
102:16
Como
leemos en este salmo, Jehová promete dejarse ver de Israel, pero dice que será
visto en su gloria, y como vimos en las escrituras la gloria de Dios es la
parte visible del Dios invisible, ahora, esto dicho por Jehová en este salmo
que Jehová seria visto de Israel en su gloria, Jehová se lo confirma a Isaías
que él mismo dejaría ver en gloria en
Israel, leamos:
Isaías
46:13
13
Haré que se acerque mi justicia; no se alejará, y mi salvación no se detendrá. Y pondré salvación en Sion, y mi gloria
en Israel.
Isaías
35:2
Floreserá
profusamente, y también se alegrará y cantará con júbilo; la gloria del Líbano
le será dada, la hermosura del Carmelo y de Sarón. ELLOS VERÁN LA GLORIA
DE JEHOVÁ, LA HERMOSURA DEL DIOS NUESTRO.
Pero hay una advertencia, para aquellos que dicen
que la gloria de Dios (en este caso Jesús), es otro diferente al Padre, Dios
mismo hace esta advertencia:
Isaías 42:
8 Yo Jehová; este es mi nombre; y a otro no
daré mi gloria, ni mi alabanza a esculturas.
Como leemos Dios no dará su Gloria a otro, ya que él
mismo pondrá su gloria en Israel (Isaías46:13), y por medio de esa Gloria
dejarse ver el mismo en Israel (salmo 102:16), ya que la gloria de Dios como lo
vimos es Dios mismo haciéndose visible a los hombres en semejanza de Hombre
(Ezequiel 1:26-28)
Ahora, Jehová mismo dijo que él que hablaba se haría
presente (Isaías 52:6), y se haría presente en gloria tomando forma de hombre
para venir el mismo a salvarnos, leamos:
Isaías
35
Floreserá
profusamente, y también se alegrará y cantará con júbilo; la gloria del Líbano
le será dada, la hermosura del Carmelo y de Sarón. ELLOS VERÁN LA GLORIA
DE JEHOVÁ, LA HERMOSURA DEL DIOS NUESTRO.
Decid
a los de corazón apocado: Esforzaos no temáis; he aquí que VUESTRO DIOS
VIENE CON RETRIBUCIÓN, CON PAGO, DIOS MISMO VENDRÁ Y OS SALVARÁ
Y
habrá allí calzada y camino, y será llamado Camino de Santidad; no pasará
inmundo por él, SINO QUE ÉL MISMO ESTARÁ CON ELLOS;
Isaías
35:2,4,8
COMO
LEEMOS EN ESTE APARTE DE ISAÍAS, JEHOVÁ MISMO PROMETE VENIR ÉL MISMO A
SALVARNOS, PERO DICE QUE LO VERÍAN EN GLORIA, ES DECIR EL DIOS INVISIBLE SE
HARÍA VISIBLE PARA VENIR A SALVARNOS, PERO ISAÍAS SIGUE HABLANDONOS DE ESTO,
LEAMOS:
Voz que clama en el desierto: Preparad camino
a Jehová; enderezad calzada en la soledad a nuestro Dios.
Y
SE MANIFESTARÁ LA GLORIA DE JEHOVÁ, Y TODA CARNE JUNTAMENTE LA VERÁ; PORQUE LA
BOCA DE JEHOVÁ LO HA HABLADO.
HE
AQUÍ QUE JEHOVÁ EL SEÑOR VENDRÁ CON PODER.
Isaías
40:3,5,10
COMO
LEEMOS EN ESTE OTRO APARTE, JEHOVÁ LE DICE A ISAÍAS, QUE EL MISMO VENDRÁ, Y QUE
TODA CARNE LO VERÁ, PERO DICE QUE VENDRÁ EN GLORIA, ES DECIR QUE EL DIOS
INVISIBLE SE HARÁ VISIBLE PARA VENIR A SALVARNOS, YA QUE LA GLORIA DE DIOS, ES
LA PARTE VISIBLE DEL DIOS INVISIBLE.
Pero
Jehová nos dice por medio de Isaías, que esta es una gloria diferente a la de
los ejemplos que vimos, ya que esa era una gloria pasajera, ahora por medio de
Isaías Jehová nos dice que esta gloria postrera será diferente, ya que es
una gloria que nace, Y COMO TODOS
SABEMOS LO QUE NACE DE UNA MUJER ES UN HOMBRE U HIJO, leamos:
Levántate,
resplandece; porque ha venido tu luz, Y LA GLORIA DE JEHOVÁ HA NACIDO
SOBRE TI.
Porque
he aquí que tinieblas cubrirán la tierra, y oscuridad las naciones; MAS SOBRE
TI NACERÁ JEHOVÁ, Y SOBRE TI SERÁ VISTA SU GLORIA.
Isaías
60:1-2 (ANTIGUA VERSION)
Como
vemos, Jehová el Padre nos dice que él mismo es el que nacerá, y que ese niño
es él mismo, y esta es su gloria. Es por esto que Isaías 7:14 dice, que el
Señor mismo nos dará señal “Jehová”, que la virgen concebirá y dará a luz un
niño y que ese niño se llamará EMANUEL (que quiere decir Dios con nosotros)
confirmando con esto lo dicho por él mismo, que Jehová mismo vendría a
salvarnos, y lo haría viniendo en su gloria, es decir, el Dios invisible se
haría visible como un hombre, para venir salvarnos, es por esto que dice en el
capítulo 9, verso 6 de Isaías, que ese niño se llamará: DIOS FUERTE Y PADRE
ETERNO, dando cumplimiento a lo dicho por él mismo: QUE JEHOVÁ MISMO VENDRÍA A
SALVARNOS (ISAÍAS 33:22)
Como
vemos, Dios el Padre “Jehová” prometió en los profetas (contexto del escritor
de los hebreos) venir el mismo en gloria, es decir haciéndose visible el mismo
tomando forma de Hombre al nacer de una mujer, pero sin dejar de ser el único
Dios.
Como
vemos Dios el Padre “Jehová” prometió estar entre los Hombre como una persona,
como un ser Humano y que todo hombre lo vería, y a esta manifestación como
Hombre, Dios en los profetas le llama su gloria, su resplandor, su imagen, pero
nunca dejaría de ser el único Dios.
1.
Es
por todo esto, que el Señor Jesús dice que el que lo ve a él, ve al que lo
envió, es decir al Padre (Juan 12:44-45)
2.
Es por todo esto que el Señor Jesús dijo que
el que lo ve a él, ve al Padre (Juan 14:9)
3.
Es
por todo esto que el Señor Jesús dijo que él es la gloria que viene del Dios
único (Juan 5:44)
4.
Es
por todo esto que Pablo dice que Jesús es la imagen de Dios invisible
(Colosenses 1:15), pero Pablo enseña que Jesús es el único Dios que vino al mundo
a salvarnos manifestándose en Carne (1 de Timoteo 1:12-17, 3:16)
5.
En
conclusión, lo que el escritor a los hebreos nos dice en su inicio de su carta,
es que Dios “el Padre” en los postreros de los días nos habló en Hijo, y esto
fue testificado a los padres en los profetas, por eso Jesús es la imagen misma
de su sustancia, es decir él mismo.
CAPÍTULO 4
Ahora,
dicen los expositores de la trinidad al preguntarles de un texto donde diga que
el Hijo es Eterno, ellos siempre muestran Hebreos 1:8 – 11, donde dice:
Hebreos
1
8
Mas del Hijo dice: Tu trono,
oh Dios, por el siglo del siglo;
Cetro
de equidad es el cetro de tu reino.
9
Has amado la justicia, y aborrecido la maldad,
Por
lo cual te ungió Dios, el Dios tuyo,
Con
óleo de alegría más que a tus compañeros.
10 Y: Tú, oh Señor,
en el principio fundaste la tierra,
Y los cielos son obra de
tus manos.
11
Ellos perecerán, mas tú permaneces;
Y
todos ellos se envejecerán como una vestidura,
12
Y como un vestido los envolverás, y serán mudados;
Pero tú eres el
mismo,
Y tus años no acabarán.
A
la verdad, si tan solo leemos textualmente el verso, pareciera que esos textos
hablan que el Hijo es pre existente y que es un ser ontológico diferente al
Padre.
Pero
como ya vimos el escritor a los hebreos sigue una exegesis “método de
interpretación” no textual, sino interpretativa, ya que él dice en hebreos 1:1
que Dios habló a los padres en los profetas, y es en los profetas que se
interpreta hebreos 1:8-10, mirémoslo:
Esto
dice Hebreos 1:8-9
8
Mas del Hijo dice: Tu trono, oh Dios, por el siglo del siglo;
Cetro
de equidad es el cetro de tu reino.
9
Has amado la justicia, y aborrecido la maldad,
Por
lo cual te ungió Dios, el Dios tuyo,
Con
óleo de alegría más que a tus compañeros.
Y
su contexto en los profetas es el Salmo 45:6-7:
6
Tu trono, oh Dios, es eterno y para siempre;
Cetro
de justicia es el cetro de tu reino.
7
Has amado la justicia y aborrecido la maldad;
Por
tanto, te ungió Dios, el Dios tuyo,
Con
óleo de alegría más que a tus compañeros.
Hasta
aquí, pareciera que ese Hijo es diferente a Jehová el Padre, pero debemos
recordar que David y los salmos son proféticos, y así lo dice la escritura:
Hechos
2
29
Varones hermanos, se os puede decir libremente del patriarca David, que
murió y fue sepultado, y su sepulcro está con nosotros hasta el día de
hoy.
30
Pero
siendo profeta, y sabiendo que con juramento Dios le había
jurado que de su descendencia, en cuanto a la carne, levantaría al Cristo para
que se sentase en su trono,
Como
leemos lo que David escribió en el salmo 45 es profético y no es una realidad,
ahora el mismo escritor a los hebreos nos dice en el contexto de hebreos 1:10-12, quien es ese que es el
Hijo, que en el principio creo los cielos y la tierra, cuyo trono es por los
siglos de los siglos y sus años no acabarán, leamos:
Hebreos
1
10
Y:
Tú,
oh Señor, en el principio fundaste la tierra,
Y
los cielos son obra de tus manos.
11
Ellos perecerán, mas tú permaneces;
Y
todos ellos se envejecerán como una vestidura,
12
Y como un vestido los envolverás, y serán mudados;
Pero
tú eres el mismo,
Y
tus años no acabarán.
Y
el contexto de Hebreos 1:10.12 es el Salmo 102:25-27, leamos:
Salmo
102
12
Mas tú, Jehová, permanecerás
para siempre,
Y
tu memoria de generación en generación.
16
Por cuanto Jehová habrá edificado a Sion,
Y
en su gloria será visto;
24
Dije: Dios mío, no me cortes en la mitad de mis días;
Por
generación de generaciones son tus años.
25
Desde el
principio tú fundaste la tierra,
Y los
cielos son obra de tus manos.
26
Ellos perecerán, mas tú permanecerás;
Y
todos ellos como una vestidura se envejecerán;
Como
un vestido los mudarás, y serán mudados;
27
Pero tú eres el mismo,
Y tus años no se
acabarán.
Como
leemos, en la exegesis que hace el escritor a los hebreos “los profetas según
el verso 1”, el Salmo 102, que es el contexto de Hebreos 1:10-12, nos dice que
ese cuyos años no acabarán, el cual creo los cielos y la tierra en el
principio, no es el hijo, es Jehová el Padre, confirmando esto que a lo que se
refiere Hebreos uno, no es al Hijo eterno, sino al Padre manifestado en carne,
por eso escribe en Hebreos 2:14, que por cuanto los hijos “si habla de hijos
hace alusión a un Padre” participaron de carne y sangre, él “el Padre”
participó de los mismo, y esto es confirmado por los demás profetas, los cuales
dijeron que Dios el Padre vendría a salvarnos haciéndose hombre “carne y
sangre” al nacer de una virgen, como lo vimos en el capítulo dos y tres.
Capítulo 5
Ahora,
otro argumento de los expositores de la trinidad tienen para decir que hebreos
habla del Hijo eterno, es el que se encuentra en hebreos 9:24 que dice:
24
Porque no
entró Cristo en el santuario hecho de mano, figura del verdadero, sino en el
cielo mismo para presentarse ahora por nosotros ante Dios;
Explican
los expositores de la trinidad, que este texto muestra a las dos personas
divinas, al Cristo “el Hijo”, presentándose en el cielo ante Dios “el Padre”.
Pero
esto no es lo que enseña las escrituras, es más la respuesta a este verso la
encontramos en los textos 25 y 26 de Hebreos 9, donde nos dice esto:
25
y no para ofrecerse muchas veces,
como entra el sumo sacerdote en el Lugar Santísimo cada año con sangre
ajena.
26
De otra manera le hubiera sido necesario padecer muchas veces desde el
principio del mundo; pero ahora, en la consumación de los siglos, se presentó una
vez para siempre por el sacrificio de sí mismo para quitar de en
medio el pecado.
Los
versos 25 y 26 nos dicen que Cristo se presentó ante Dios en el cielo como el
sacrificio por el pecado, nunca como una persona divina diferente al Padre, es
deber de recordar que la escritura dice que cuando el sumo sacerdote presentaba
la ofrenda por el pecado, al quemar el sacrificio, este subía y era olor grato
a Jehová (léalo en Levítico 4).
Ahora,
esto que Cristo se presentó ante Dios en el cielo como el sacrificio por el
pecado y no como una persona Divina es también atestiguado por Juan el
bautista, ya que este dijo que Jesús es el cordero de Dios que quita el pecado
del mundo:
Juan
1
29
El siguiente día vio Juan a Jesús que venía a él, y dijo: He aquí el Cordero de Dios, que quita el
pecado del mundo.
Y
esto también fue testificado por Isaías, leamos:
Isaías
53
4
Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y
nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido.
5
Mas él herido
fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el
castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados.
6
Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino;
mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros.
7
Angustiado él, y afligido, no abrió su boca; como cordero fue llevado al matadero; y como
oveja delante de sus trasquiladores, enmudeció, y no abrió su
boca.
Pero
Juan el bautista no nos dice que ese que es el cordero de Dios (el Cristo) que
quita el pecado del mundo, sea otra persona divina diferente al Padre, Juan el
bautista nos dice esto:
Juan
1
29
El siguiente día vio Juan a Jesús que venía a él, y dijo: He aquí el Cordero de
Dios, que quita el pecado del mundo.
30
Este es aquel de quien yo dije: Después de mí viene un varón, el cual es antes
de mí; porque era primero que yo.
31
Y yo no le conocía; mas para que fuese manifestado a Israel, por esto vine yo
bautizando con agua.
32
También dio Juan testimonio, diciendo: Vi al Espíritu que descendía del cielo
como paloma, y permaneció sobre él.
33
Y yo no le conocía; pero el que me envió a bautizar con agua, aquél me dijo:
Sobre quien veas descender el Espíritu y que permanece sobre él, ése es el que
bautiza con el Espíritu Santo.
34
Y yo le vi, y he dado testimonio de que éste es el Hijo de Dios.
Como
leemos Juan el bautista testifica que Jesús es el Hijo de Dios, pero Juan también
dio otro testimonio acerca de Jesús, leamos:
Juan 1
19 Este es el testimonio de Juan, cuando los
judíos enviaron de Jerusalén sacerdotes y levitas para que le preguntasen: ¿Tú,
quién eres?
20 Confesó, y no negó, sino confesó: Yo no soy
el Cristo.
21 Y le preguntaron: ¿Qué pues? ¿Eres tú Elías?
Dijo: No soy. ¿Eres tú el profeta? Y respondió: No.
22 Le dijeron: ¿Pues quién eres? para que demos
respuesta a los que nos enviaron. ¿Qué dices de ti mismo?
23 Dijo:
Yo soy la voz de uno que clama en el desierto: Enderezad el camino del Señor,
como dijo el profeta Isaías.
COMO
LEEMOS, JUAN NOS DICE QUE JESÚS ES EL SEÑOR COMO DIJO ISAÍAS; Y EL SEÑOR QUE
DIJO ISAIAS QUE VENDRÍA ES JEHOVÁ EL PADRE, LEAMOS:
Isaías
40 (CONTEXTO DE JUAN 1:23)
1
Consolaos, consolaos, pueblo mío, dice vuestro Dios.
2
Hablad al corazón de Jerusalén; decidle a voces que su tiempo es ya cumplido,
que su pecado es perdonado; que doble ha recibido de la mano de Jehová por
todos sus pecados.
3
Voz que clama en el desierto:
Preparad camino a Jehová; enderezad calzada en la soledad a nuestro Dios.
4
Todo valle sea alzado, y bájese todo monte y collado; y lo torcido se enderece,
y lo áspero se allane.
5
Y se manifestará la gloria de Jehová,
y toda carne juntamente la verá; porque la boca de Jehová ha hablado.
6
Voz que decía: Da voces. Y yo respondí: ¿Qué tengo que decir a voces? Que toda
carne es hierba, y toda su gloria como flor del campo.
7
La hierba se seca, y la flor se marchita, porque el viento de Jehová sopló en
ella; ciertamente como hierba es el pueblo.
8
Sécase la hierba, marchítase la flor; mas la palabra del Dios nuestro permanece
para siempre.
9
Súbete sobre un monte alto, anunciadora de Sion; levanta fuertemente tu voz,
anunciadora de Jerusalén; levántala, no temas; di a las ciudades de Judá: ¡Ved aquí al Dios vuestro!
10
He aquí que Jehová el Señor vendrá
con poder, y su brazo señoreará; he aquí que su recompensa viene con
él, y su paga delante de su rostro.
Como leemos, Juan el
Bautista dice en Juan 1:34 que Jesús como el cordero de Dios que quita el
pecado del mundo, es el Hijo de Dios, PERO EL MISMO JUAN NOS DICE EN JUAN
1:19-23 QUE JESÚS ES EL SEÑOR COMO DIJO ISAÍAS, Y EL SEÑOR QUE DIJO ISAÍAS QUE
VENDRÍA ES JEHOVÁ EL PADRE, Y ASÍ LO DICE ISAÍAS 40:1-11 CONTEXTO DE JUAN
1:19-23.
Ahora, esto dicho por
Juan el Bautista que Jesús como el cordero de Dios que quita el pecado del
mundo “el Cristo”, es el mismo Jehová el Padre que se manifestó como hombre
para salvarnos, esto mismo lo confirma Juan el apóstol, leamos:
Juan 1:10 nos dice que Jesús como el Verbo, estuvo en
el mundo, y que el mundo por él fue hecho, PERO QUE EL MUNDO NO LO
CONOCIÓ.
PERO EN EL CONTEXTO DE JUAN 1:10 QUE ES 1 DE JUAN 3:1, NOS
DICE JUAN QUE ESE QUE ESTUVO EN EL MUNDO, AL CUAL EL MUNDO NO CONOCIÓ, FUE AL PADRE, Y EN EL VERSO 5 NOS DICE
QUE FUE EL PADRE QUE APARECIO PARA QUITAR NUESTROS PECADOS “es decir él mismo
es el cordero que quita el pecado del mundo”,LEAMOS:
1
Juan 3
Reina-Valera 1960 (RVR1960)
Hijos de Dios
3 Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, para que seamos llamados hijos de Dios; por
esto el mundo no nos conoce, porque no le conoció a él.
5 Y sabéis que él apareció para quitar nuestros
pecados, y no hay pecado en él.
Juan
en su evangelio nos dice que el que estaba en
el mundo era el verbo, ES DECIR JESÚS; y que él fue el que hizo el mundo, y a
este fue el que el mundo no conoció. (Juan 1:10)
PERO EN SU PRIMERA CARTA NOS DICE QUE
EL QUE ESTUVO ENTRE NOSOTROS Y EL QUE EL MUNDO NO CONOCIO FUE AL PADRE, OSEA A
JEHOVÁ,
y en el verso 5 de 1 de Juan 3, nos dice el apóstol que él “el Padre” apareció
para quitar nuestros pecados, y como ya vimos según Juan el bautista, Jesús
como el cordero de Dios es el que quita el pecado del mundo.
Como
vemos tanto para Juan el Bautista como para Juan el apóstol, Jesús es el Padre
que vino al mundo a quitar el pecado del mundo, y esto concuerda con las
escrituras de los profetas “contexto de Hebreos”, donde dice que el que vendría
al mundo haciéndose Hombre para salvarnos, es Jehová el Padre.
Por
lo tanto el argumento trinitario que nos dice que Cristo se presentó en el
cielo ante Dios como otra persona divina es mentira, ya que Jesús según Hebreos
9:25 y 26 se presentó ante Dios como el sacrificio por el pecado, y Según Juan
el Bautista y Juan el apóstol Jesús es el Padre “Jehová” que vino como Hombre
para salvarnos y presentarse él mismo como el sacrificio en su cuerpo de carne
para quitar el pecado del mundo.
Pero
será que habrá una contradicción en las palabras de Juan, no, Juan ciertamente sabía
que ese hombre era el mismo Dios “Jehová” manifestado en carne. Y por eso
Dice: Y EL VERBO ERA DIOS.
La paz del Señor Jesús
sea con cada uno de ustedes.
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TIENEN ESTE CONOCIMIENTO.
Esta
enseñanza fue escrita por Alexander
Escobar Serrato
Si
deseas comunicarte conmigo lo puedes hacer al correo
o
al móvil 3053193880
la
paz del Señor Jesús sea con cada uno de ustedes.
Gracias Hno. Alexander Escobar Serrato, que bueno que este material este en la Web disponible para nuestra instrucción. Qué nuestro único Dios Jesucristo le Bendiga Grandemente.
ResponderEliminarHas amado la justicia, y aborrecido la maldad, Por lo cual te ungió Dios, el Dios tuyo, Con óleo de alegría más que a tus compañeros.
ResponderEliminarHebreos 1:9
¿ UN DIOS UNGE A OTRO DIOS?